Ingredientes para 4 personas:
Dos paquetes de pasta fresca al huevo rellena
(éstos eran tortellini de requesón y espinacas, y ravioli cuatro quesos)
Queso parmesano rallado
Rúcula para adornar.
Salsa:
Conserva de tomate frito
3 dientes de ajo
albahaca
orégano
dos cayenas
pimienta recién molida
mezcla de especias picantes italianas
medio vasito de vino tinto
cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Elaboración.
Cocer la pasta según indica el paquete.
Para la salsa, picar los ajos muy finitos, y dorar con las cayenas en el aceite a fuego lento. Añadir orégano, pimienta y albahaca. Cuando estén casi hechos, añadir el vino tinto, y remover hasta que se reduzca un poco.
Con una cuchara sopera, retirar la mayor parte del aceite y reservar en un cuenquito.
Añadir un bote de tomate frito en conserva, remover con los ajos, y calentar. Espolvorear la salsa con especias italianas picantes y seguir removiendo hasta que se mezcle todo bien.
Cuando esté hecha la pasta, ponerla en una fuente y añadir una cucharada del aceite sobrante, y más pimienta, y remover para que no se pegue. Dejar reposar un minuto para que no esté muy blanda.
Verter la salsa sobre la pasta, y servir con un poco de rúcula y queso parmesano.
Es una variante fácil de la típica salsa de tomate, para cuando apetece algo picante.
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